VUDU PARA PRINCIPIANTES

Además de realizar pintadas callejeras exigiendo el cese inmediato de hostilidades por parte de los imbeciles que gobiernan el mundo, podemos convertirnos en simpáticos terroristas que claven agujas oxidadas a pequeños muñecos con apariencia humana

 

Podemos extender el vudu como práctica revolucionaria y provocar algunas lumbalgias en los palacios donde se decide sobre nuestra vida. El código penal todavía no lo contempla como delito, por lo que podemos provocar algunas bajas y jubilaciones anticipadas. El terrorismo de baja intensidad permite interrelacionarnos unos con otros, incluso ligar, y poder contar en horario laboral a los compañeros y en nuestras salidas nocturnas las habilidades revolucionarias con las que hemos sido dotados.

Fujimori ya ha sido eliminado

Extret de: “Terrible Hechicero Anarkista”(web)